Un paseo, una frase y un cambio de época…
En 1904, Julio A. Roca realizó uno de sus primeros paseos en automóvil junto a Dalmiro Varela Castex. Durante el recorrido, el vehículo sufrió un desperfecto mecánico. Con su agudo sentido
del humor, Roca comentó entre risas:
“Nunca los caballos me dejaron a pie, ni en el medio del desierto.”
Aunque el auto era manejado por Varela Castex —quien había traído el primer Benz al país y fue presidente y socio número 1 del Automóvil Club Argentino—, en esta escena es Roca quien se lleva el protagonismo. Su frase encapsula con elegancia el paso simbólico de una Argentina a caballo hacia otra impulsada por motores…
Fotografía c.1904. Colección Cesar Gotta
Historia Visual Argentina (HVA)
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